Solid English nació de la búsqueda de un método que fuera realmente efectivo. Era curioso que cuando yo enseñaba inglés en clases particulares tenía resultados mucho mejores que cuando enseñaba usando los lineamientos metodológicos de la institución donde laboraba. Cansado de ser partícipe de repetir un modelo de enseñanza que no daba los resultados que nuestros estudiantes esperaban, en el año 2005 decidí comenzar a trabajar en la creación un método de enseñanza del inglés que diera los resultados que yo obtenía con mis estudiantes particulares y que previniera o corrigiera los errores más comunes en los estudiantes hispanohablantes.

El contenido se basó inicialmente en lo que evalúan los exámenes internacionales de suficiencia de nivel B1 y se complementó con los conceptos gramaticales necesarios para presentar un examen tan exigente como el TOEFL; esos conceptos se organizaron secuencialmente desde lo más sencillo a lo más complejo. Desde ese entonces tomé la decisión de ofrecer una formación de la más alta calidad al menor costo posible para el estudiante.

El método se implementó inicialmente en un instituto presencial de inglés con resultados espectaculares. Iniciaba con un curso de 30 horas en el que el estudiante hacía un recorrido por toda la gramática del inglés, se apropiaba de los principios de la pronunciación y construía una buena base de vocabulario. Al terminar ese curso, el estudiante iniciaba una serie de niveles de conversación. Lo sorprendente era que en el primer nivel de conversación de solo 20 horas, el estudiante ya podía hablar sobre sí mismo, su familia y sus amigos, en todos los tiempos verbales, sin errores gramaticales y con un una excelente pronunciación. La diferencia la había hecho el conocimiento que ya traía sobre gramática, pronunciación y vocabulario del inglés.

El programa de inglés que creé y seguí perfeccionando continuamente fue el que usé de ahí en adelante en Colombia y luego en Estados Unidos cada vez que tenía estudiantes particulares, siempre con un éxito rotundo. Mis limitaciones de tiempo para atender el alto número de estudiantes que me referían y la confluencia de varios factores llevaron a que dicho método se convirtiera en lo que es hoy el curso virtual Solid Foundations in English.

En un ambiente que simula el salón de clase y con la interactividad de la web de hoy, los estudiantes de SFE aprenden a comprender, hablar, leer y escribir inglés sin errores porque entienden muy bien cómo funciona su gramática y pronunciación, mientras construyen una base sólida de vocabulario. Por medio de clases en video disponibles las 24 horas del día, de cada palabra aprenden su significado, uso en contexto y pronunciación explicada detalladamente y modelada por hablantes nativos con una variedad de acentos para entender un inglés global.

La estructura y gramática del inglés ha sido secuenciada desde los temas más básicos hasta llegar a los temas más avanzados que generalmente se estudian solo en los cursos de preparación para pruebas de certificación internacional más exigentes.

La conversación se desarrolla desde la primera lección mediante técnicas probadas por su efectividad y actividades que guían al estudiante a hablar en situaciones comunicativas usando las estructuras y vocabulario aprendidos. Nuestra herramienta de reconocimiento de voz permite desarrollar la conversación a cualquier hora y desde cualquier lugar con conexión a Internet

Según el ritmo de cada estudiante, SFE se puede completar en 60-90 horas. Cada licencia da derecho a 100 horas de acceso para tener tiempo adicional para repasar lo aprendido. Como ejemplo, estudiando 1 hora diaria de lunes a viernes, una persona lo puede completar en 5 meses. Completando el mínimo de horas de estudio sugerido por el Marco Común Europeo de Referencia para las Lenguas, con SFE se puede alcanzar los niveles A2, B1, B2 o superior según la experiencia previa o número de horas de estudio acumuladas.